Las personas que nos dedicamos a la educación EN y DESDE el tiempo libre, sabemos que es un segmento de tiempo fantástico para intervenir de forma positiva. Pero como todo en la vida, si una correcta educación, es también un espacio que puede tornarse negativo. Y si queremos sacarle partido en positivo, debemos conocer la otra cara de la moneda.
Para ello, Jaume Trilla (1989) nos presenta 10 valores y contravalores del tiempo libre:
- Libertad, autonomía, independencia, versus alienación, manipulación, dependencia.
- Felicidad, placer, diversión, versus aburrimiento, tedio.
- Autotelismo, conocimiento desinteresado, versus ostentación, ocio,mercancía.
- Creatividad, personalización, diferencia, versus consumismo, masificación, adocenamiento.
- Sociabilidad, comunicación, versus aislamiento, incomunicación, soledad negativa.
- Actividad, esfuerzo automotivado, versus pasividad, indolencia, activismo frenético.
- Culturización, versus banalización cultural.
- Valores de lo cotidiano, versus monotonía, inercia.
- Valores de lo extraordinario o excepcional, versus extravagancia, lo estrafalario.
- Solidaridad, participación social y política, versus insolidaridad, indiferencia, pasotismo.
Yo, claramente prefiero centrarme en los valores y posibilidades que el tiempo libre nos ofrece (por eso las remarco), intentando aprovecharlas para educar.
¿Y vosotr@s?