Después de unos cuantos días de lluvia en los que parecía que el verano no llegaba, Julio trajo consigo una ola de calor, playas y piscinas a rebosar y a la 7ª animadora. Asturiana y gijonesa, para más señas.
A «Naza» la conocí en uno de los períodos de no contrato cuando estaba en Mar De Niebla, y me contrataron para cubrir su bajar de maternidad en una empresa de servicios, que llevaba la animación sociocultural de varias residencias geriátricas. Para llegar a la jornada completa nos hacíamos unas 4 o 5 residencias a la semana… Solo curramos juntos un par de semanas, pero pude comprobar lo que es tener amor por un colectivo como las personas mayores al verla trabajar a ella.
Un placer presentaros a…
Nazaret Díaz (Gijón)
Buscadora, soñadora, luchadora… uff… me resulta difícil definirme, creo que eso prefiero dejarlo para los que me conocen.
La gran pregunta ¿Qué es para ti la Animación Sociocultural?
Todo. Una vía de escape, una herramienta fundamental para el día a día de cada persona, una manera de vivir la vida, un camino hacia la transformación, el movimiento , un cambio de actitud…. Una manera increíble para trabajar por la Unidad.
Y te dedicas a esto porque…
Porque me encanta… es muy bonito ver como con la animación puedes dar sentido a la vida… yo que he trabajado durante años en el colectivo de la animación con personas mayores he podido comprobar lo maravilloso que es eliminar en la persona mayor la sensación de considerar la vejez como una etapa homogénea, aburrida , estable y sin vida. Que un mayor te diga: “No gracias, yo ya no estoy para hacer esas cosas…” y finalmente consigas que se integre, se motive, participe en torneos, debates, obras de teatro, bailes, canciones, incluso que proponga actividades… en definitiva conseguir dar vida a los años.
El logro de estos objetivos motiva, guía, da sentido y justifica la existencia de mi especialidad.
En la actualidad, ¿trabajas en algo relacionado con la ASC?
En Agosto del año pasado decidí dar un parón a mi vida laboral ya que estoy embarazada de mi tercer hijo. Ha sido una decisión difícil y muy pensada, después de tantos años, dejar a un lado la animación con mayores me daba mucha pena aunque ahora podría decir que me voy a volcar por un tiempo en la animación con mis hijos y mi familia que creo que es fundamental y ya con tres hijos voy a tomarme un respiro y dedicarme a ellos por un tiempo. Igualmente la animación forma parte de mi día a día.
La ASC como ámbito profesional, ¿qué opinión tienes sobre ello?
Hay muy poca valoración. Recuerdo cuando empecé a trabajar en varias residencias de mayores lo difícil que me resultó… no creían que se pudiera hacer muchas cosas, por desconocimiento o por lo que dije anteriormente, porque la vejez se supone que es una etapa “sin actividad, sin vida”, incluso muchas veces no se me presentaba como animadora, sino como Terapeuta; quizás por lo que he dicho al inicio de la pregunta… la animación no está valorada.
¿Qué mejorarías de la formación que recibimos los animadores y las animadoras?
Hace unos 15 años que me formé como animadora así que creo que algo ha evolucionado pero aún queda mucho.
Entonces, casi no tocamos la Tercera Edad en el ciclo por lo que mi opinión al respecto podría decir que hay que mejorar mucho, teniendo en cuenta que los mayores son una gran parte de la población y que es una etapa más en la vida a la que si tenemos el privilegio, podremos llegar. En nuestra mano está verla como una etapa maravillosa.
Principalmente pienso que la base de la animación es la empatía, por ello creo que la educación en valores es principal para poder ejercer como animador con cualquier colectivo.
La idea de estas entradas era visibilizar a otros animadores/as, algo que nos quieras contar…
Primeramente quería agradecerte Pablo que me dieras la oportunidad de colaborar contigo, me alegro mucho de haberte conocido y que sepas que me encanta tu blog.
Aún queda mucho por hacer, la animación es indispensable para todo y en mi caso que he trabajado con mayores creo que lo es todo.
Y no podía acabar sin mandaros mi poema y reflexión de vida preferidos.
Un abrazo cálido y de esperanza para que la animación consiga la valoración que se merece.
Tercera Edad
¿Pero es que acaso hay una Tercera Edad?
¿No todos los días, cuando amanece,
la vida vuelve a comenzar?
¿No todos los días también florece,
allá en los jardines, el rosal?
El final del camino es el principio
si lo miras hacia atrás…
Tu alma es eterna, poderosa.
Es la imagen de Dios que te ha formado.
Hazla cada día más luminosa
sin que te importe el tiempo que ha pasado.
Tú puedes a tu noche volver día.
De lo que son abismos, formar cumbres.
Convertir en ventura tu agonía.
De lo que son cenizas, hacer lumbre.
Tú puedes hacer de cada instante
el momento más grato de tu vida.
A un trozo de cristal volver diamante,
porque todo es según como se mira.
Es por eso que digo que no hay una Tercera Edad.
Cada día de tu vida es el principio
y no el final…
Poema de VÍCTOR MANUEL OTERO GONZÁLEZ
NO es viejo
No es viejo aquel que pierde su cabello o su última muela,
sino su última esperanza.
No es viejo, el que lleva en su corazón el amor siempre ardiente;
No es viejo el que mantiene su fe en si mismo,
el que vive sanamente alegre,
convencido de que para el corazón puro no hay edad….
El cuerpo envejece…
pero no la actividad creadora del espíritu.
Goethe concluyó Fausto a los 82 años;
el Tiziano pintó obras maestras a los 98;
Toscanini dirigió orquestas a los 87;
Edison trabajaba en su laboratorio a los 83;
Benjamín Franklin contribuyó a redactar
la constitución de los Estados Unidos a los 81….
Isaac Wislicki empezó a ser pintor a los 104 años .
Para el profano la ancianidad es invierno;
para el sabio es la estación de la cosecha.
El crepúsculo de la vida trae consigo su propia lámpara.
Hay una primavera que no vuelve jamás y otra que es eterna;
la primera es la juventud del cuerpo la segunda es la juventud del alma.
Cuando una noble vida ha preparado la vejez
no es la decadencia lo que ésta recuerda:
son los primeros destellos de la inmortalidad.
Es por ello cosa estupenda ver un viejo
que asume la segunda parte de su vida
con tanto coraje e ilusión como la primera.
Para ello tendrá que empezar por aceptar
el sol del atardecer es tan importante
como el del amanecer y el mediodía,
aunque su calor sea muy distinto.
El sol no se avergüenza de ponerse,
no siente nostalgia de su brillo matutino,
no piensa que las horas del día lo están echando del cielo.
No se experimenta menos luminoso ni hermoso
por comprobar que el ocaso se aproxima,
no cree que su resolana sobre los edificios
sea menos importante o necesaria.
Cada hora tiene su gozo.
El sol lo sabe y cumple hora a hora su tarea…
Ahhhh… si todos los ancianos entendieran
que su sonrisa sobre los hombres
puede ser tan hermosa y fecunda
como ese último rayo de sol antes de ponerse!!!
Autor desconocido
¡Mil gracias por tu aportación! Espero que hayáis disfrutado tanto como yo de leerla. El próximo mes ponemos rumbo sureste para conocer al próximo animador ;O)